El Norwegian Breakaway fue inaugurado en 2013 y renovado en 2020, pero en 2025 tendrá otra renovación antes de operar en el Mediterráneo. Las imágenes de este artículo corresponden al momento de su inauguración. Es un barco que hace un homenaje a Nueva York, la ciudad que es su puerto base durante parte del año y residencia de sus madrinas, las Rockettes.
Aunque hay muchas innovaciones en el Norwegian Breakaway y muchas estancias han sido redimensionadas o cambiadas de lugar, simplificando bastante podríamos afirmar que este barco es un Norwegian Epic remodelado y mejorado, que busca la mayor rentabilidad posible para la compañía rodeando al pasajero de opciones de ocio, en muchos casos de pago.
Ficha Técnica
Empezamos a recorrer el Norwegian Breakaway por el exterior. Si ya en el Norwegian Epic nos pareció que había poco espacio para tomar el sol y refrescarse en una piscina, en el Breakaway este parámetro ha empeorado. De la cubierta exterior, el tercio de proa está ocupado por The Haven, el área exclusiva para pasajeros de suites, el tercio de popa está ocupado en buena parte por el Sport Complex, y en la zona central, están los toboganes. ¿Que nos queda? una piscina central encajonada entre dos bares, dos jacuzzis, una sucursal del casino y un escenario. Hay otra piscina debajo de los toboganes, pero le pasará desapercibida a muchos adultos porque no es fácil verla.
Uno podría pensar que Norwegian ha considerado que como en Nueva York nieva en invierno y hace frio buena parte del año, no hacía falta poner demasiado sitio para el relax al aire libre, pero eso no cuadra con que sea uno de los pocos barcos con terrazas en los restaurantes, y que la zona de popa Spice H2O esté pensada para fiestas nocturnas al aire libre además de como solárium. Por eso, la carencia de una piscina en esa zona, suplida con un conjunto de cascadas, es tan sorprendente. Una piscina que se pudiese cubrir por la noche para servir como pista de baile habría contentado a todos, y la culpa no es de los astilleros Meyer Werft que han construido el barco, porque ellos ya instalaron una así en el Disney Dream. Por cierto, en la zona Spice H2O tiene lugar una tirada de fuegos artificiales una vez cada crucero.
El Norwegian Breakaway es un barco de 3.963 pasajeros en ocupación doble, de los cuales, solo 160 pasajeros tienen acceso a The Haven.
Veamos qué increíbles atracciones tiene la cubierta exterior del Norwegian Breakaway para mantenernos entretenidos. Sport Complex es una zona en popa que incluye la cancha de baloncesto, minigolf, pero sobre todo un circuito elevado de obstáculos que promete emociones fuertes. Y es que en uno de sus extremos uno puede caminar sobre una viga que sobresale del casco del barco (The Plank), enganchado obviamente a un rail de seguridad, una actividad para muy valientes según podemos ver en la imagen.
Debajo del Sport Complex tenemos un bufé de piscina semi-abierto, es decir, con techo, pero sin puerta que lo separe del exterior. Es el Uptown Bar & Grill que ofrece hamburguesas, perritos, y otros picoteos. También está la sala de ocio/discoteca de quinceañeros Entourage, francamente más bonita que el Bliss Ultra Lounge para adultos que hay en la cubierta 7. Y adyacente tenemos Video Arcade, es decir, la sala de videojuegos. Si, la sala de videojuegos en la cubierta exterior. Creo que esto ya pasaba en el Epic.
Siguiendo hacia proa, a continuación viene la zona de toboganes, empezando por el rocódromo en la parte de atrás de la chimenea. Hay dos parejas de toboganes más o menos simétricos y un quinto tobogán más suave y abierto. Los más espectaculares son Free Fall, dos toboganes tubulares con «caída libre» en los que se alcanza velocidad suficiente como para remontar una cuesta y dar una curva antes de volver a acelerar en la bajada. El operario te introduce en una cápsula y tras cerrar la puerta una cuenta atrás te prepara para la caída, cuando el suelo se «abre» y caes a toda velocidad por el interior del tobogán, son unos tres segundos desde que se abre la trampilla hasta que sales por el otro extremo, adrenalina pura. La otra pareja de toboganes es The Whip, con forma de tirabuzón prometen velocidad y mareo.
En esta cubierta, la 16, hacia delante no hay más instalaciones públicas que los pasillos laterales con tumbonas y una pequeña sala de juegos para bebés de menos de 2 años, porque el tercio de proa es para The Haven, aunque la mitad del espacio que queda en los laterales del techo retráctil es un solárium público para todos los pasajeros.
Una cubierta más abajo tendríamos la piscina infantil con los personajes de Bob Esponja y chorros para jugar, una piscina para adultos debajo de los toboganes, y ya más hacia proa, después de las casetas de los bares llegaríamos a la piscina principal, cuya condición ya comentamos al principio del artículo.
En el tercio de proa del Norwegian Breakaway están las instalaciones habituales del spa y gimnasio, además de la barbería para caballeros. No podemos ofrecer fotos del spa pues en esta presentación para prensa y agentes de viaje la naviera decidió comercializar los tratamientos del spa, y ya no fue posible visitarlo estando ocupado.
En el tercio de popa se ubica el bufé Garden Café, luminoso, moderno y práctico, con grandes zonas de autoservicio de bebidas y café, variedad y calidad de comida, aunque sin embargo se ha prescindido de los mostradores en isla y su efecto beneficioso contra la formación de colas. Como en este barco Norwegian Cruise Line no ha dado puntada sin hilo, quien quiera comer con vino tiene unas máquinas autoservicio con ocho variedades, que podremos degustar previo paso de la tarjeta de gastos.
The Haven
Es un concepto exclusivo de Norwegian Cruise Line que, tomando el tercio de proa superior del barco, distribuye las suites alrededor de un patio central, donde los pasajeros de las suites cuentan con su propia piscina con techo retráctil, mini spa, una lounge y un refinado restaurante.
Además, una cubierta más arriba, disponen de una zona privada para tomar el sol The Haven Private Sundeck, y el Vibe Beach Club, otra zona para tomar el sol más elegante, solo para adultos, pero a la que puede acceder cualquier pasajero pagando 20$ el día o 60$ por todo el crucero.
Cubiertas interiores del Norwegian Breakaway
Antes de bajar a las cubiertas 6, 7 y 8, donde se ubican la mayoría de las instalaciones públicas, haremos una parada en la cubierta 12 y 13, en cuyo centro se encuentra Splash Academy, y aunque su nombre coincide con cierto programa de televisión no se trata de una escuela de saltos de trampolín, sino del club infantil para niños de entre 6 meses y 12 años. Recordemos que los adolescentes de 13 a 17 años tienen el club Entourage en popa de la cubierta 16.
Empecemos en la cubierta 6, las más baja con instalaciones públicas, aunque hay una cubierta 5 con camarotes. El lobby central está presidido por una enorme pantalla que muestra videos evocadores, aunque en otros barcos de la compañía ya hemos visto como se usa también para emitir eventos deportivos si la ocasión lo merece. Como esta zona está abierta hacia arriba, la pantalla se puede ver desde el Bar O’Sheehan. Hay una barra de bar y en la esquina el Atrium Café, donde los cafés expreso son de pago (normal) y los pastelitos también (¿como?). Al otro lado del atrio tenemos la recepción y el mostrador de excursiones.
En proa tenemos dos importantes instalaciones de ocio que ocupan esta cubierta y la superior. El Spiegel Tent, una sala circular donde al mismo tiempo que cenas tiene lugar el espectáculo Cirque Dreams, producido por la productora del mismo nombre. Dicen quienes lo vieron que es un espectáculo fantástico, aunque resulta difícil cenar y estar pendiente de las acrobacias al mismo tiempo. (nota: el Spiegel Tent se sustituirá en 2025 por Silver Screen Bistro, un concepto de cena + cine).
También está el Broadway Theather, donde podemos ver el musical Rock of Ages, 5 veces nominado a los premios Tony, y que, pese a su logotipo heavy metal, no es más fuerte que un drama romántico y cómico con varias tramas entrelazadas, incluidos guiños al mundo gay, con la música rock de los 80 como banda sonora. Una escenografía cuidada y unos protagonistas a la altura crean un espectáculo sobresaliente, pero…. demasiado largo para cualquiera que no sea angloparlante: más de hora y media de musical! A mí me dio tiempo a cabecear pero también a seguir el ritmo con los pies, y a reír algunos chistes pero no enterarme de nada en otros.
Espectáculo muy bueno, pero solo apto para personas con, como mínimo, buen nivel de inglés.
Volviendo a la cubierta 6 del Norwegian Breakaway, caminando desde el atrio hacia popa llegamos a otro atrio de 3 alturas, presidido por una espectacular lámpara led que cambia de color continuamente. A un lado tenemos el restaurante francés Le Bistro (20$), con terracita en el propio atrio, seguido del Teppanyaki (25$), una de las opciones gastronómicas preferidas por los clientes de esta naviera, no en vano, en cada barco que construyen, amplían esta sala mas y mas. El Teppanyaki es un restaurante oriental con varias planchas de cocina alrededor de las cuales se sientan los comensales. El cocinero hace diversas preparaciones sobre la plancha, que reparte entre los comensales, a veces de forma bastante informal, al estilo «abre la boca y levanta la cabeza que te voy a tirar por el aire un trozo de pollo».
Seguimos caminando hacia popa y encontramos una elegante zona de sillones con el Mixx Bar en el centro, y un restaurante a cada lado, Savor Restaurant y Taste Restaurant, ambos idénticos e incluidos en el precio del crucero y que forman, junto al restaurante Manhattan, los tres restaurantes principales del barco. Aquí se acaba la cubierta 6 y podemos pasar a la 7.
En la cubierta 7 el teatro ocupa la parte de proa, para a continuación dar paso al «barrio» O’Sheehan Neighborhood Bar & Grill, una amplia zona dividida por el pasillo central que tiene a babor el grill donde sirven comida casi a cualquier hora, y a estribor la zona de estilo pub irlandés, con mesas altas y juegos como dardos, un billar, y al fondo, escondida, la bolera de dos pistas. A los anglos les encanta, porque no hubo forma de encontrarla vacía para la foto en todo el día y medio que pasamos a bordo.
Hacia popa comienza el Breakaway Casino, muy grande, a mi entender sobredimensionado, aunque no cabe duda de que al público norteamericano le encantará y donde encontramos adosado el restaurante Shangai’s Noodle Bar.
Enfrente se sitúa en un nueva ubicación la discoteca Bliss Ultra Lounge, que en este barco pierde la habitual decoración de Norwegian Cruise Line para limitarse a ser una gran sala rectangular panelada con leds de colores que cambian su color al ritmo de la música.
Para terminar con la cubierta 7, en popa del Norwegian Breakaway tenemos The Manhattan Room restaurant, quizá la referencia más clara en todo el barco a la ciudad de Nueva York, aunque su decoración art decó es muy similar a la que ya conocimos en el Norwegian Epic. Destaca el corredor de entrada con varias zonas de sofás muy cálidas y acogedoras. Este restaurante tiene la particularidad de tener una pista de baile en el centro, que se usa para actuaciones durante la cena, pero francamente, salvo que estés en las dos primeras filas alrededor de la pista, resulta casi imposible ver la actuación.
Pasamos a la cubierta 8, donde en proa ya encontramos camarotes, para ubicar en el centro del barco la sala Fat Cats Jazz & Blues Club, lugar de actuaciones en vivo cargadas de energía y complicidad con la audiencia, al que es recomendable acudir con tiempo para encontrar sitio.
Enfrente, y abierto hacia el corredor central, La Cucina Italian Restaurant, con sus columnas forradas en piedra «fake» marcando un estilo rústico. Tanto la Cucina como Fat Cats como todos los restaurantes que hay en esta cubierta tienen acceso al exterior, donde cada restaurante tiene su terraza para cenar al aire libre, en lo que se conoce como The Waterfront.
Maltings Beer & Whiskey Bar es una de las zonas mas agradables para tomar algo en el barco, y si además del whiskey te quieres fumar un puro, en el Humidor Cigar Lounge aledaño tienes tu espacio.
Nos encontramos a continuación con la parte superior del atrio donde cuelga la gran lámpara led, y aquí tenemos el acceso al Ice Bar, donde para entrar tenemos que proveernos de un abrigo térmico con capucha y guantes, para estar un rato dentro sin congelarnos. Nota para desprevenidas: entrar sin medias no es buena idea.
En un lateral tenemos el Shaker’s Cocktail Bar, amenizado por un pianista, y al otro, tres opciones gastronómicas interesantes. Wasabi es la barra de sushi, donde se paga por plato pedido, aunque a precios bajos. The Raw Bar ofrece mariscos y vino, mientras que Ocean Blue es el restaurante del prestigioso chef neoyorkino Geoffrey Zakarian en alta mar. En algunas salidas incluso habrá ocasión de interactuar con el chef y aprender técnicas de cocina.
El siguiente área de la cubierta 8 está dedicada a las tiendas, tanto de recuerdos, ropa y básicos, como la tienda de fotografía.
Finalmente, en la popa tenemos dos restaurantes importantes. Cagney’s Steakhouse ofrece carnes a la brasa de la mejor calidad y en un entorno sofisticado, mientras que Moderno Churrascaria es un rodizio brasileño donde los camareros van pasando por las mesas con grandes espadas de donde sirven cortes de carne como Picaña, Filet Mignon (extraordinario), pollo, cordero, etc… y piña asada. Antes de empezar con las carnes, te sirves de un buffet de entrantes. Aquí, la comilona es inevitable.
CAMAROTES DEL NORWEGIAN BREAKAWAY
Se acabó el experimento, los camarotes ondulados del Norwegian Epic no existen en el Norwegian Breakaway. Quizá por ser demasiado osados para la mentalidad norteamericana, ya que tenían el inodoro y la ducha integrados en la habitación, aunque separados por una mampara, o quizá porque algunos inconvenientes pesaron más que su bonito diseño.
Camarote exterior 5214 Categoría OB. Máximo 2 pax. Aprox. 15 m2
Camarote exterior 5764 Categoría O1. Máximo 4 pax. Aprox. 15 m2. Baño con bañera.
Mini Suite Familiar 14200. Categoría MA. Máximo 4 pax. Aprox. 25 m2 (incluyendo balcón).
THE HAVEN – Zona exclusiva de suites
The Haven Villa familiar 16114. Categoría S4. Máximo 6 pax. Aprox. 56 m2. Dos dormitorios y cuartos de baño. Acceso a The Haven Courtyard, mayordomo 24h.
The Haven Penthouse 10106. Categoría S7. Máximo 4 pax. Aprox. 42 m2. Acceso a The Haven Courtyard, mayordomo 24h.
ESTUDIOS – Zona para singles (pasajeros que viajan solos)
Studio Lounge es una sala de dos pisos donde los singles pueden socializar. Estudio 11511 Categoría T1. Aprox. 9 m2.
Video del Norwegian Breakaway
Norwegian Breakaway Toboganes Free Fall
