La CLIA, principal asociación del sector, predice un incremento del 6,6% en el 2011, gracias a la incorporación de 8 nuevos barcos y una mejora en la crisis internacional, sobre todo en EEUU, que posibilitaría alcanzar los 16 millones de cruceristas.
Los 6 líderes de navieras que ofrecieron su punto de vista durante la conferencia inicial coincidieron con esa previsión , señalando en todo caso otros aspectos que les preocupaban más como un exceso de regulación medioambiental con criterios dispares en cada país o región.
El precio del petróleo es también una preocupación, y aunque los nuevos barcos son cada vez más eficientes, un precio alto podría traducirse en cruceros con recorridos más cortos.
Ya en la alfombra de la feria, la sensación era que había mucho más movimiento que el año anterior, con más afluencia de ejecutivos de navieras dejándose ver. No obstante, notamos que hubo pocas presentaciones a prensa por parte de los puertos, parece que la crisis ha ralentizado el desarrollo de nuevas infraestructuras.
La presencia del astillero coreano DSME (Daewoo) con una fascinante maqueta de un barco de 131000 toneladas me hace augurar que no pasará mucho tiempo antes de que se empiecen a construir barcos allí.