Durante más de 180 años, Cunard ha defendido el poder restaurador de los viajes por mar. Una nueva e innovadora investigación llevada a cabo en el buque insignia de Cunard, el Queen Mary 2, confirma que sólo cinco días en el mar pueden tener un impacto positivo en varias capacidades cognitivas, como la memoria, el razonamiento lógico, las capacidades perceptivas y la resolución de problemas, lo que demuestra que la travesía transatlántica de Cunard beneficia significativamente el bienestar mental y emocional.
Esta investigación pionera en neurociencia, reveló que la travesía transatlántica de Cunard combinada con su programa de experiencias enriquecedoras, puede aumentar las capacidades cognitivas en un 26%, haciendo que los viajeros estén más alerta, concentrados y resilientes.
En el estudio, realizado por Human Understanding Agency, participaron 40 pasajeros de todo el mundo que se embarcaron en la emblemática travesía transatlántica de Southampton a Nueva York. Los investigadores utilizaron herramientas biométricas para medir los cambios cognitivos y fisiológicos antes y después de cinco días en el mar. Los resultados fueron notorios y mostraron mejoras en la memoria, la resolución de problemas, la atención y el bienestar emocional general.
Los principales resultados obtenidos fueron los siguientes:
- Memoria: un 29% de mejora en el recuerdo de palabras, lo que indica un mayor rendimiento de la memoria a corto plazo.
- Resolución de problemas: 125% de mejora en tareas complejas de razonamiento lógico y espacial.
- Atención: 14% de mejora en la concentración durante tareas visuales.
- Relajación: la relajación autodeclarada aumentó un 158%, mientras que los niveles generales de estrés fisiológico disminuyeron un 35%, lo que refleja la influencia relajante del viaje.
El Dr. Jack Lewis, neurocientífico, comentó los resultados: “Lo que más me llama la atención de este estudio es lo bien que encajan todas las piezas. El tiempo que pasaron los pasajeros en el barco redujo claramente sus niveles de estrés, según medidas subjetivas y objetivas. La principal hormona del estrés, el cortisol, es bien conocida en la literatura científica por interferir en diversos procesos cognitivos. Así pues, es probable que el aumento de la memoria y la capacidad de razonamiento lógico observado en este estudio se atribuya al efecto antiestrés de los viajes por mar. Esto, combinado con la increíble variedad de actividades estimulantes a bordo del único transatlántico del mundo, permite a los cerebros de los pasajeros liberar todo su potencial”.
Más allá de los hallazgos cognitivos del estudio, la oferta única de Cunard proporciona un santuario incomparable para la relajación y la renovación. Desde cautivadoras conferencias de expertos de renombre mundial como parte del programa Cunard Insights hasta tratamientos de bienestar personalizados, cada elemento del viaje está cuidadosamente diseñado para fomentar el bienestar. Todo ello se complementa con el célebre White Star Service de Cunard, que garantiza que cada momento a bordo se distinga por su atención personalizada.
Katie McAlister, presidenta de Cunard, añadió: “Este estudio refuerza lo que siempre hemos sabido: un viaje en Cunard es mucho más que unas vacaciones. Nuestros programas de enriquecimiento cuidadosamente seleccionados, las experiencias de bienestar a medida, la gastronomía de primera clase y el renombrado White Star Service, combinados con la oportunidad de relajarse y abrazar la serenidad del océano, hacen que nuestros pasajeros se sientan renovados, inspirados y revitalizados”.
Información adicional sobre Cunard está disponible en www.cunardcruceros.com o través de su Agente General en España y Portugal, Mundomar Cruceros.