Esta primera jornada se ha centrado en la tecnología móvil, clave en los próximos años en la relación de las navieras con los pasajeros, ya que estos podrán planificar su crucero y reservar excursiones a través de dispositivos móviles, donde estarán disponibles videos informativos sobre el destino. Igualmente la irrupción de tarjetas de embarque en dispositivos móviles reducirá la necesidad de grandes áreas de facturación en las terminales de cruceros.
Los representantes de las navieras estuvieron de acuerdo en la importancia en que las entidades de turismo colaboren con ellas incluyendo en sus folletos los cruceros que navegan en su área de influencia. Así ocurre en Asia, donde este tipo de colaboraciones es habitual.
Por otra parte, durante el debate se ha visto un cambio de postura respecto a las excursiones operadas por terceros que han pasado de ser las grandes denostadas a ser posibles socios de negocio en la industria.
También se habló sobre las nuevas tendencias de excursiones en bicicleta o running sobre todo en puertos “Boutique”, así como el gran interés en shopping por parte de los cruceristas, por lo que se recomendó horarios amplios de comercio.
Gianni Onorato , CEO de MSC Cruises, destacó que de mayo de 2017 a mayo de 2018 inauguraran tres nuevos barcos de dos clases diferentes. Por primera vez MSC Cruceros construirá barcos en Fincantieri buscando nuevas ideas de diseño que se diferenciasen claramente de los barcos construidos hasta ahora en STX Europe. Se mostró muy optimista respecto al futuro ya que van a invertir 5.000 millones de euros en nuevos barcos.
China centró el debate en esta primera jornada gracias a las enormes expectativas que despierta con sus cifras macroeconómicas. En palabras de Philip Orderver, Vicepresidente Internacional de Ventas y Marketing de Crystal Cruises, la tasa de penetración actual de los cruceros en la región de Asia-pacífico, es de un 0,1% lo que supone 2 millones de cruceristas.
Si se alcanzase la tasa de penetración de EE.UU cifrada en 3,3 % estaríamos hablando de un mercado de 50 millones de pasajeros, lo que representa un enorme potencial, tanto de desarrollo de la industria en Asia como de la recepción de cruceros asiáticos en Europa.