La opulencia de los zares es ahora su mayor tesoro turístico, todo un contrasentido, y es que la resaca del comunismo ha creado una sociedad polarizada, donde los ricos son muy ricos y viven en la opulencia de los zares.
Lamentablemente, Rusia vive una cruzada mortal contra un colectivo minoritario, al igual que la Alemania nazi con los judios. El enemigo de Rusia son ahora los gays.