El nuevo barco de cruceros fluviales de Croisieurope para el rio Duero presenta una imagen renovada de la compañia.
Con una decoración que nos recuerda a las compañías maritimas upscale, el Gil Eanes es una barco fluvial destinado a atraer pasajeros que busquen una decoración actual sin perder de vista la calidad en servicio y gastronomía.
En la recepción ya encontramos casi todas las claves decorativas de la nave: color topo complementado con vistosos sillones de azul petroleo, y resto de elementos en blanco. La escalera que nos conduce a la cubierta superior aporta calidez con la madera y luminosidad. Pero antes de subir, vamos a ver el salón principal del barco.
Este acogedor salón panorámico en la proa del barco nos sirve como refugio del frio o el calor durante el día, como lugar de actividades de animación y como discoteca nocturna. Comodo y elegante.
Subiendo las escaleras accedemos a este precioso hall dotado de mucha luz natural, no solo por las dos puertas cristaleras laterales que dan acceso a la cubierta exterior, sino tambien por el lucernario circular que sobre la lampara dirige luz natural hacia la recepción.
Sin duda, salvando todas las distancias, me recuerda a los nuevos barcos de otra naviera francesa, Ponant, que tambien cuentan con un hall en tonos topo con atrio circular y lampara colgante.
Esta cubierta está enteramente dedicada a camarotes, todos iguales, excepto dos suites gemelas en popa. En proa está el puente de mando, manejado por dos oficiales, muy sencillo y tecnológico a la vez.
Los camarotes, completamente blancos excepto por toques de color en los textiles y en un panel, no llegan al tamaño de un camarote barco marítimo, pues responden a otra filosofía. El ventanal de suelo a techo muy cerca de la cama ofrece unas vistas increibles sobre el paisaje, y podemos abrir una de sus hojas para asomarnos si nos apetece. La TV cuenta con un sistema motorizado que la escamotea en el techo, además de ofrecer contenidos interactivos. El aire acondicionado se puede controlar totalmente desde el panel de control, es decir, se puede apagar, no como en los barcos marítimos que es imposible.
Las camas son siempre gemelas, no hay opción a cama matrimonial. Se duerme realmente bien en ellas, son firmes pero se amoldan perfectamente a tu cuerpo.
Detrás de la cama hay un pequeño escritorio, enchufes, el mando del hilo musical y el telefono. Además, el armario, no muy grande, pero complementado con una consola al lado de la cama. Hay cobertura Wifi en todo el barco.
El baño es realmente impresionante. Con suelo de madera, la ducha es francamente grande y cuenta con mampara en lugar de cortina.
Está es una de las suites de popa, con mucho mas espacio y un gran armario, además de terraza propia en popa. La TV por supuesto se puede girar hacia la cama. El baño es exactamente igual al del resto de cabinas. Nos aseguran que en este tipo de barcos con motores pequeños y navegación suave, en popa no se notan temblores como en los barcos marítimos.
Antes de explorar la cubierta solarium vamos a pasar revista a otra importante estancia, el comedor, ubicado una planta por debajo de recepción (el barco tiene 3 cubiertas mas la solarium. Las cubiertas inferiores cuentan con ascensor.
El comedor es un espacio acogedor y elegante, decorado sobriamente pero con detalles de calidad como las flores frescas en el centro de la mesa. Un cuadro preside la estancia como viene siendo habitual en los cruceros fluviales de Croisieurope, y es que el autor es el fundador de la compañía, Gerard Schmitter, padre del actual CEO, Christian Schmitter, y de los otros hermanos que ocupan diversos puestos de responsabilidad en la compañía. Durante nuestra estancia en el Gil Eanes tuvimos ocasión incluso de conocer a la tercera generación de la familia Schmitter que ya van ocupando puestos en la compañía.
El personal de servicio del barco es en su mayor parte portugués, lo que facilita a los españoles entenderse con ellos, posiblemente, más que si fuesen franceses. La gastronomía ofrece buenas pinceladas de clásicos portugueses como tambien cocina francesa e internacional. No defrauda. Estamos en un barco de 132 personas, así que la calidad final se asemeja más a la de un restaurante de tierra que a la cocina "industrial" de barcos para 3.000 personas.
Finalmente, la cubierta exterior nos permite tomar el sol mientras disfrutamos de las vistas al aire libre. Tambien hay una zona cubierta con toldo y mesas, para los que prefieren conversación, una partida de cartas, o cualquier otra actividad sentados.
Nos sorprendió, quizás porque uno nunca valora adecuadamente lo que tiene cerca de su casa, oir de boca del Sr. Christian Schmitter, CEO de Croisieurope, que el Duero es el rio mas bonito de Europa, que la ruta transcurre entre un paisaje cambiante de viñedos, cañones, paisajes aridos y paisajes verdes que impresiona incluso a los más experimentados capitanes de la compañía cuando les toca navegar aquí.
Los cruceros fluviales Croisieurope operan en regimen de Todo Incluido, y aquí os dejamos una captura de las cartas donde especifican que está incluido y que es un extra.
Y unas fotos del exterior, con toda la tripulación (son 25 para 132 pasajeros).
Y finalmente, un pequeño video
