Celebrity Infinity

Crucero de 12 días con la calidad que esperas de esta compañía, trato exquisito con un servicio tanto en los comedores, bufete, piscina, recepción. La verdad es que me ha recordado al primer que hicimos ya hace años en el Solstice. Los espectáculos con artistas de alto nivel, en especial un grupo de 3 músicos ingleses (The FlyRights), y un solista al piano que cantaba y tocaba a la perfección temas modernos (Elton John, etc.), como también la banda de músicos del crucero que siempre han tocado en directo y los bailarines que crearon diferentes actuaciones.
El barco esta un poco antiguo pero conservado, ibamos un 80% de pasajeros y en ningún momento ha habido colas en los restaurantes como tampoco el día que tuvimos que bajar a tierra en los Tenders, una organización de 10.
Respecto a la restauración hay que resaltar la calidad y presentación de los platos, la carta estaba en Castellano lo que era de agradecer por muchos hispano parlantes, el servicio atento y amable.
Si hay que mencionar por mi experiencia que si un crucero funciona es por el equipo que realiza los programas de entretenimiento y en especial la directora del mismo que ha estado en todo momento atenta a todo e influía simpatía a tope.
Resumiendo esta opinión como siempre es desde mi experiencia en esta ruta (Islas Griegas), en estas fechas (Marzo-Abril), con un tiempo espectacular y unas escalas interesantes.

Aunque es un restaurado, todo es perfecto, calcado de la clase Milenium
Tercer crucero con esa compañía, todo era como en casa, sabía dónde estaba ubicado todo, sin haber tocado el barco antes.
Hasta el camarote recordaba dónde colocaba cada caosa
La ATENCIÓN mejor IMPOSIBLE.

El Infinity es un barco elegante, su estado de conservación es bastante bueno.
Embarque: bien, el proceso fue bastante breve y rápido, en unos 10 minutos ya estábamos a bordo. Teóricamente el camarote estaba disponible para las 13, pero a las 12:30 ya estaba listo.
Instalaciones: unas bien y otras no tanto. Bien el Constellation Lounge y la piscina de talasoterapia (aunque los chorros laterales no funcionaban). Biblioteca pequeña e incómoda y el teatro tenía un ruido de fondo muy fuerte (supongo que de la climatización).
Camarote: interior, todo muy nuevo y ordenado, de tamaño algo mayor que casi todas las compañías que conozco excepto Holland America.
Comida: en restaurante pricipal bastante bien en preparación, pero bastante repetitiva. En buffet mal sin paliativos, muy corta en opciones, además que no es verdaderamente un buffet libre sino que te van sirviendo los camareros la comida. Muchas veces además no había sitio en el buffet por más que buscaras mesas.
Entretenimiento: aceptable, unos eran buenos, otros no tanto y otros eran bastante malos. Lo mejor unas cantantes y pinanista islandesas que actuaron la noche de Reikiavik.
Servicio: bien en camarote y en restaurante principal, muy flojo en bares.
Pese al buen itinerario y la decoración elegante, el Infinity no llegó a la que se supone un crucero "Premium"