Azamara Quest

Sinceramente teníamos unas expectativas muy altas con respecto a la naviera de lujo de Royal y no las cubrimos, aunque he de decir que en general todo estuvo muy bien.
La comida es muy similar a Celebrity, quizás algunos productos de mayor calidad, pero los principios de cocina son los mismos, así es que en este apartado no tenemos queja, es el punto fuerte de esta compañía.
En el barco al ser pequeño lo tienes todo a mano y no hay mucho que reprochar, decir que se le notan claramente los años al barco.
Las escalas una delicia, prácticamente todo el día, incluidas algunas horas de la noche, así es que no se puede pedir mucho más. Puedes ir con tranquilidad y disfrutar del destino sin ningún tipo de estrés. También comentar que por norma general te dejan en el centro de la ciudad o te ponen un bus para llevarte que funciona durante varias horas.
Hay personal de habla hispana, pero curiosamente en recepción ninguno, cosa que me ha resultado bastante extraño. Decir que está enfocado a público inglés y americano.
El hecho de poder ir a cenar a cualquier hora es una ventaja, aunque en algunas ocasiones había que esperar, y es raro porque en este barco la gente iba tarde a pesar del público.
Entretenimiento prácticamente inexistente, la gente suele beber bastante porque está incluido en el precio una gran variedad de cocktail, algunas cervezas y otras bebidas alcohólicas.
La habitación mejor de lo esperado, aunque el baño minúsculo, se nota la época de construcción de la nave.
Considero que no vale la pena pagar la diferencia que hay con Celebrity, porque los barcos son mucho más modernos y espaciosos, y con una comida muy similar.